Empleados 100 % propietarios

Bajar

Después de décadas de esfuerzo para establecer una empresa de éxito y construir una cultura creativa, los cofundadores de Taylor, Bob Taylor y Kurt Listug, están entusiasmados con la decisión de transferir la propiedad de la compañía a los empleados. Y, de hecho, el futuro se presenta tan luminoso para Taylor como para los guitarristas.

Es lunes por la mañana en el campus de Taylor en El Cajón, California. Pero, aunque estamos en enero, hoy no se ve el habitual trajín de guitarras que cobran vida en la planta de producción. La explicación es que, al otro lado de la calle, nuestros artesanos se han reunido con todos los demás compañeros en el aparcamiento frente al almacén de envíos para asistir a un anuncio virtual dirigido a la plantilla en pleno.

Allí se ha instalado un videowall de LEDES de casi 10 metros con un reloj digital que marca una cuenta atrás. Los trabajadores llevan mascarilla y guardan la distancia de seguridad bajo el cielo azul del sur de California. En otras partes del mundo, los empleados de Taylor que están teletrabajando, incluido nuestro equipo en Europa, han recibido instrucciones para seguir la transmisión de vídeo a través de un enlace de Internet.

El anuncio se ha anticipado en tono positivo como una importante celebración para los trabajadores. Sin embargo, no se han dado detalles, así que en el ambiente flota una sensación de curiosidad y expectación.  

A la hora señalada, empieza la reproducción de un vídeo con la imagen de un orgulloso Bob Taylor de 17 años sosteniendo la primera guitarra que construyó, una dreadnought de 12 cuerdas. El vídeo continúa con un repaso a la historia de Taylor comentado por las voces familiares de Bob y el cofundador Kurt Listug, que van evocando recuerdos sobre una sucesión de fotos de ellos mismos de jóvenes y de los complicados inicios de la empresa. 

Entre otras cosas, hablan de la pasión compartida por la construcción de guitarras que les unió en la tienda American Dream y les motivó a asociarse para comprar el negocio por 3700 $ y establecerse por su cuenta cuando tenían 19 y 21 años, respectivamente. Bob y Kurt rememoran las dificultades a las que tuvieron que enfrentarse y la férrea determinación que les mantuvo remando contra corriente durante 10 años, antes de que por fin pasaran a jugar en primera división y pudieran empezar a pagarse un sueldo a sí mismos. 

«Las pasamos moradas durante mucho tiempo», dice Kurt. «Tuvimos que aprender todo: cómo construir guitarras, cómo vender guitarras, cómo crear un negocio». 

El vídeo sigue la evolución de Taylor hasta lo que es hoy en día. Bob y Kurt agradecen a los empleados el arduo trabajo y el espíritu de colaboración que han impulsado el crecimiento y el éxito de la empresa y han acabado definiendo su cultura única. También se refieren a las turbulencias del 2020. 

«La manera de reaccionar ante la adversidad es una prueba de fuego para la cultura de una empresa», afirma Kurt, relacionando la perseverancia y la capacidad para resolver problemas de sus primeros días junto a Bob con la forma en que la compañía respondió a los inauditos desafíos del 2020. «Queremos que sepáis lo orgullosos que nos hicisteis sentir al veros a todos actuando a la altura de las circunstancias». 

Bob profundiza en esa idea al destacar los éxitos del 2020, como la ágil creación y el lanzamiento de la serie American Dream, la presentación de nuestra nueva guitarra GT y la adaptación de los equipos de producción a los nuevos (y numerosos) protocolos de trabajo seguro en la era de la COVID. 

«Se nos planteaban retos enormes, pero Kurt y yo sabíamos que como empresa los superaríamos e incluso saldríamos más fuertes de todo ello, porque ya lo habíamos hecho antes. Y la gente que trabaja aquí con nosotros tiene un talento y una capacidad de dedicación increíbles». 

A continuación, el vídeo pasa a otro segmento en el que Bob y Kurt hablan a cámara para dirigirse a los empleados. 

«Hoy es un gran día en la historia de Taylor Guitars», proclama Bob. «Un día que Kurt y yo llevamos mucho tiempo planeando». 

En ese punto, abordan una pregunta que cada vez les plantean más frecuentemente ahora que los dos superan los 60 años: «¿qué pasará con Taylor Guitars cuando vosotros ya no trabajéis?» 

Tal como reconoce Bob, «aunque Kurt y yo aún no estamos pensando en jubilarnos, la verdad es que esa es una cuestión importante, y hoy sabréis la respuesta». 

«Cualquier empresa de éxito tiene que mirar más allá de sus fundadores», interviene Kurt. «¿Quién será el propietario? ¿Quiénes serán las personas más adecuadas para pilotar la nave hacia el futuro? ¿Quién mantendrá a Taylor fiel a sus valores y preservará la cultura que nos identifica? Aunque a Bob y a mí todavía nos quedan muchos años en la empresa, queríamos asegurarnos de guiarla en la mejor dirección para garantizar su continuidad y crear las mejores condiciones para que sobreviva con éxito durante los próximos 100 o 200 años». 

«Para nosotros, los ‘viejos tiempos de gloria’ son hoy y mañana». 

Bob Taylor

Kurt explica los recursos habituales que tienen las empresas para planificar una transición de la propiedad, y aclara por qué ninguno de ellos les parecía viable ni a Bob, ni a él, ni al diseñador jefe Andy Powers, que en el 2019 pasó a ser el tercer socio propietario de Taylor. Sus alternativas eran dejar la empresa a la familia (Kurt no tiene descendencia y las hijas de Bob nunca mostraron interés en el negocio), venderla a otro fabricante de instrumentos musicales (habían recibido ofertas, pero creyeron que ninguna otra empresa entendería o defendería realmente la cultura de Taylor), traspasarla a una compañía de capital privado (lo cual podría comprometer la salud financiera o la misión esencial de la empresa) o cotizar en bolsa (Taylor es demasiado pequeña para eso). 

«Ninguna de esas posibilidades iba a preservar los valores de la compañía o a mantener el foco en el diseño y la fabricación de los mejores instrumentos musicales, que es el secreto de nuestro éxito», argumenta Kurt. «Por otro lado, perderíamos el control de la toma de decisiones y la facultad de establecer los objetivos de la empresa». 

En el anuncio, Bob comunica a la plantilla que en realidad solo había una opción. 

«De hecho, así como nos veis aquí a Kurt y a mí, ya no somos los dueños de Taylor Guitars. Porque, el 31 de diciembre, mientras vosotros os encontrabais en plenas celebraciones navideñas, Kurt, Andy y yo estábamos firmando los documentos para la transferencia oficial de la propiedad de Taylor Guitars a vosotros, nuestros queridos trabajadores. Habéis oído bien: ahora, Taylor Guitars es 100 % propiedad de los empleados. ¡Enhorabuena!» 

Terry Myers, uno de los trabajadores más antiguos de Taylor (32 años en la casa), estaba viendo ese vídeo desde el aparcamiento. 

«No me lo podía creer», reconoce. «Sinceramente, cuando me enteré de que iban a dar un mensaje importante a nivel de empresa, lo primero que pensé fue que la habían vendido y me preguntaba quién sería el nuevo dueño. Sin embargo, ese anuncio parecía estar rodeado de un aura positiva, lo cual me extrañaba un poco. Todos sabemos que la venta de una compañía no suele ser una buena noticia para la mayoría de los empleados. Y, cuando nos dijeron que nosotros éramos los nuevos propietarios, pensé: ¡vaya, eso sí que no lo había visto venir! Fue un momento muy especial».

Al Moreno, realizador de vídeo de Taylor encargado de documentar el evento, también procesó a nivel personal lo que acababa de ocurrir. 

«Me sentí como un músico que acaba de entrar en un supergrupo legendario», compara. «Estoy muy orgulloso de formar parte de esta comunidad de trabajo». 

La transición hacia un PTAE 

El mecanismo elegido por Taylor para traspasar la propiedad a los trabajadores fue un plan de transferencia de acciones a los empleados (PTAE). Este programa, establecido en la ley federal de Estados Unidos con el nombre de «Employee Stock Ownership Plan» (ESOP), funciona como un tipo de plan de jubilación que otorga a los empleados cualificados de una empresa una participación en la propiedad a través de cuentas individuales. Las acciones de la empresa son gestionadas por un fideicomiso en nombre de los empleados y, con el tiempo, se dividen y se asignan a cuentas de jubilación personales (en la práctica, los empleados no compran las acciones). El valor de cada cuenta de jubilación es un reflejo del rendimiento de la empresa: cuanto mayor sea su éxito y crecimiento, más beneficio económico llegará a los trabajadores. Cada año, la compañía aporta una contribución a las cuentas de los empleados. Cuando un trabajador deja la empresa o se jubila, el PTAE le compensa de acuerdo con el valor de la compañía y la participación que el empleado tenga en su cuenta. 

Bob y Kurt reflexionan sobre la transición de la propiedad de la empresa, sus esperanzas en el futuro de Taylor y aquello de lo que se sienten más orgullosos.

«Hoy en día, cada vez hay más trabajadores que sencillamente quedan apartados de la posibilidad de salir adelante y generar riqueza». 

Kurt Listug

«Con este sistema, podemos pagar a nuestra gente de una manera más sustancial y con más significado», explica Kurt. «Esto da a todos los trabajadores una participación financiera directa en el éxito de la empresa, lo cual les mantendrá enfocados en la construcción de los mejores instrumentos musicales para las generaciones futuras». 

La importancia de planificar con tiempo 

Kurt, Bob y Barbara Wight, directora financiera de Taylor, empezaron a investigar sobre los PTAE hace bastante tiempo. De hecho, la empresa ha estado proyectando activamente esta transición durante unos siete años. Bob cuenta que él y Kurt aprendieron a valorar la planificación a largo plazo como un principio fundamental desde los primeros días de su asociación. 

«Cuando Kurt y yo teníamos veintitantos años, buscábamos dar a nuestra empresa la forma más conveniente para nosotros», recuerda. «Un día, fuimos a hablar con un abogado. Nos empezó a decir: ‘cuando vendáis la empresa…’, y yo le corté: ‘¿qué quieres decir? No tengo ninguna intención de vender esta empresa’. Él contestó: ‘Bob, vas a vender la empresa, ya sea por accidente cuando mueras o en algún momento antes de que eso ocurra y aún tengas el control de la compañía’. Esa bofetada me hizo ver muy claro que pensar en el futuro iba a ser clave para nosotros». 

Barbara Wight, que entró en Taylor en julio del 2009, había aprendido por las malas la importancia capital de crear un plan de sucesión de propiedad. 

«Pasé por la dura experiencia de ayudar a una gran empresa líder mundial en su sector a materializar su transición cuando el fundador murió inesperadamente sin haber establecido un plan de sucesión. Ahí intervienen dos elementos: la gestión de la compañía y la entidad de la propia empresa, que es un organismo. Y, si no tienes un plan de sucesión para que ese organismo sobreviva después de que tú ya no seas parte de él, va a ser muy difícil que siga adelante». 

«Zildjian se fundó en el siglo XVII, Martin en 1833… No es raro que las compañías de la industria de la música tengan una vida muy larga». 

Barbara Wight

Ese fue un punto importante en la entrevista entre Barbara, Bob y Kurt previa a su contratación. 

«Yo no estaba dispuesta a volver a pasar por una situación así», reconoce Barbara. «Quería asegurarme de que Bob y Kurt entendían esa necesidad de planificación. Y, por supuesto, así era, porque ellos también piensan a largo plazo. En realidad, hemos estado tratando este tema desde que yo entré en Taylor». 

Andy Powers viene para quedarse 

Hablando de pensar a largo plazo, uno de los ejemplos más evidentes del compromiso continuo de Taylor con el diseño de guitarras fue la llegada de Andy Powers, que fue fichado por Bob casi 10 años antes de esta transición de la propiedad. Cualquiera que haya seguido la prolífica oleada de innovaciones de Taylor durante esta década ya tendrá una idea del enorme impacto de Andy como arquitecto de nuestro diseño de vanguardia. No es ningún secreto que Andy fue contratado para ser el sucesor de Bob Taylor como constructor de guitarras. Lo que quizá no sea tan conocido es que Bob quería explícitamente a alguien que fuera relativamente joven y garantizara un vínculo a largo plazo con Taylor. Cuando Bob escribió la «lista de cualidades» que quería para su sucesor, uno de los puntos era que esa persona fuera alguien por debajo de la treintena pero que tuviera 20 años de experiencia en la fabricación de guitarras. Parecía imposible que alguien lo cumpliera, pero, sorprendentemente, Andy marcó esa casilla (construyó su primera guitarra cuando tenía 9 años). 

Andy reafirmó su compromiso con los nuevos empleados-propietarios de Taylor después de que Bob y Kurt anunciaran la transición de la propiedad. 

«Mi idea es pasar toda mi carrera profesional aquí, dedicado a este maravilloso mundo de la guitarra que tanto amamos», declara. «Bob siempre ha dicho que él y Kurt pasaron mucho tiempo levantando unos cimientos sólidos y un techo sin goteras, y en esta próxima generación ya nos centraremos en dar forma al interior». 

Bob afirma que la contratación de Andy y el trabajo diario con él es uno de los logros de los que está más orgulloso, y lo considera como un ejemplo de la filosofía proactiva de la empresa. 

«Andy es mejor constructor de guitarras que yo (es más; creo que es uno de los mejores del mundo). Y eso es fantástico, porque significa que no vamos a conformarnos con recrear el pasado, sino que vamos a mejorar el futuro. Para nosotros, los ‘viejos tiempos de gloria’ son hoy y mañana». 

La importancia de la cultura del trabajo 

Como empresa, Taylor podía haberse conformado con establecerse como una tienda respetada en el mercado de las guitarras acústicas de gama alta. Pero Bob y Kurt siempre tuvieron miras más ambiciosas. 

«Cuando compramos American Dream, dijimos: ‘algún día seremos tan grandes como Martin’», recuerda Kurt. «No dejaba de ser gracioso que eso lo dijeran dos chavales, pero realmente ese era nuestro objetivo».  

Con el tiempo, Bob y Kurt fueron incorporando a otros colaboradores a su proyecto. Y entendieron que, para que la empresa siguiera creciendo y se mantuviera fiel a sus valores, tenían que crear una cultura sólida junto con otras personas que compartieran sus opiniones, perspectivas e iniciativa. 

«A Kurt, a Andy y a mí nos encanta hacer guitarras, pero aún nos gusta más crear empleos y carreras para los demás». 

Bob Taylor

«Aquello iba más allá del simple negocio”, defiende Kurt. «Era un negocio, pero también se trataba de atraer a gente tan apasionada por su profesión como Bob y yo. Queríamos crear un entorno de trabajo que priorizara la innovación, la resolución de problemas, la colaboración y el respeto. Un lugar en el que todo el mundo se sintiera empoderado para desplegar su talento particular y tuviera una sensación de orgullo por su labor». 

Bob todavía recuerda vivamente una epifanía que experimentó cuando era un joven constructor que aspiraba no solo a dominar su oficio, sino a convertirlo en una vocación atractiva para otras personas. 

«En aquellos primeros días de lucha, cuando me encantaba lo que hacía pero no tenía un duro, me marqué otra meta: lograr que ese trabajo se convirtiera en una ocupación de la que otras personas se sintieran orgullosas. Quería darles la oportunidad de plantarse delante de sus amigos con una trayectoria profesional y decirles: ‘yo también tengo una carrera, me dedico a hacer guitarras’». 

Décadas más tarde, y aparte del reconocimiento personal que se ha ganado como pionero del diseño y la fabricación de guitarras en la época moderna, Bob valora sobre todo la empresa de más de 1200 trabajadores en la que se ha convertido Taylor. 

«A Kurt, a Andy y a mí nos encanta hacer guitarras, pero aún nos gusta más crear empleos y carreras para los demás». 

Los empleados-propietarios de Taylor destacan los aspectos de la cultura de la compañía con los que más conectan.

Tren de largo recorrido 

Kurt está convencido de que la transferencia de la propiedad a los trabajadores era el mejor camino a seguir desde la perspectiva empresarial. Pero también le entusiasma la idea de ofrecer un medio para que los nuevos empleados-propietarios de Taylor puedan crear un mejor futuro financiero para ellos y sus familias, especialmente en una época de creciente desigualdad económica en todo el mundo. 

«Hoy en día, cada vez hay más trabajadores que sencillamente no tienen la posibilidad de salir adelante y generar riqueza», lamenta. «La mayoría de las personas no tendrán la oportunidad de crear abundancia financiera en su vida, a menos que reduzcan sus gastos al mínimo y reciban unos ingresos lo bastante altos como para poder ahorrar algo de dinero. Pero no podrán recibir pagos en forma de capital ni tener control sobre él. Este acuerdo de propiedad supone una oportunidad para que los empleados puedan acumular capital a medida que la empresa vaya creciendo. En su plan de jubilación, reunirán un dinero que jamás podrían haber generado de otra manera». 

Pastel para todos 

Mientras exploraban la transición de la propiedad, una de las prioridades de Bob, Kurt y Andy era encontrar un marco adecuado que acogiera a todos los empleados de Taylor, incluidos los de México, Sudamérica, el Reino Unido y la Unión Europea. Al fin y al cabo, la sede de Taylor en Ámsterdam (que actúa como núcleo operativo para gestionar nuestra propia red de distribución y ventas e incluye un centro de servicio y reparación totalmente equipado) ha sido vital para nuestro crecimiento internacional durante los últimos diez años.  

El segundo complejo industrial de Taylor en Tecate, Baja California, México (situado aproximadamente a una hora de nuestro cuartel general en El Cajón, Estados Unidos), también ha tenido un papel fundamental. Allí es donde fabricamos la Baby Taylor, la GS Mini y las series Academy, 100 y 200, además de estuches y fundas para guitarra. 

«Uno de nuestros mayores éxitos ha sido el auge de las operaciones en Tecate», manifestaron Bob y Kurt en un mensaje dirigido a los empleados de Taylor en México después del anuncio del PTAE. «Creemos que esta es una de las mejores fábricas de guitarras del mundo, y tenéis que estar orgullosos del trabajo que habéis hecho para que Taylor lidere la industria y nuestros instrumentos sean tan populares en todo el planeta». 

Dado que las regulaciones del PTAE están regidas por la ley federal de los Estados Unidos, la búsqueda del mecanismo apropiado para incluir a empleados de varios países añadió una notable complejidad al proceso, ya que cada territorio tiene sus propias leyes. La directora financiera Barbara Wight se puso manos a la obra con este tema y trabajó con asesores externos especializados en ayudar a las empresas a conducir la transición de la propiedad a través de un PTAE. Esta es una de las razones por las que el proceso de planificación duró varios años. 

«Había que tener en cuenta a la totalidad de los implicados, y la estructura no habría sido correcta hasta asegurarnos de que todos ellos quedaran debidamente reconocidos en la transacción», comenta Barbara. «Eso incluía a Bob, Kurt, Andy y nuestros trabajadores en todo el mundo. También tenía que ser un marco favorable para nuestros proveedores y clientes, la comunidad local, el colectivo empresarial y las entidades que nos han ayudado a adquirir la compañía».

En los años previos a la transición, la fecha marcada como objetivo siempre había sido el 31 de diciembre del 2020. Pero nadie contaba con una pandemia. 

«Cuando todo saltó por los aires y hubo que cerrar las fábricas, el plan quedó a un lado», explica Barbara. «Tuvimos que pasar al modo de supervivencia y, ante todo, cuidar de nuestro personal. Pero, con el paso de los meses, empezamos a ver que el mundo giraba la mirada hacia la música, y eso nos motivó a recuperar la idea. En septiembre del año pasado, dijimos: ‘hagámoslo’. Y comprimimos un proyecto de un año en solo tres meses, desde septiembre hasta el 31 de diciembre, porque pensamos que sería genial arrancar el 2021 de una forma increíblemente positiva para todos nuestros empleados, distribuidores y clientes». 

Los trabajadores de la planta de Taylor en Tecate están incluidos en el PTAE establecido en los Estados Unidos. Este arreglo es el primero de su clase en el ámbito de los PTAE, y da lugar a un nuevo paradigma que otras empresas podrían optar por seguir. 

«Un PTAE es la mejor opción para nosotros, porque significa que nuestro objetivo primordial de construir instrumentos de máxima calidad para los músicos continuará vivo en el futuro». 

Andy Powers

Los empleados del Reino Unido y la Unión Europea se beneficiarán de un programa similar (un PTAE global) contemplado en las regulaciones de la UE. 

Nate Shivers, director de ventas de Taylor para Europa, Oriente Medio y África, vive y trabaja en Ámsterdam, y subraya que los programas de tipo PTAE no son habituales en Europa. 

«El hecho de que Taylor se complicara la vida para aplicar los mismos principios básicos a su plantilla en Europa fue una gran sorpresa para los trabajadores», afirma. «Eso significó toda una declaración de compromiso con el equipo europeo por parte de Taylor». 

Nate también reconoce que la noticia fue recibida con una sensación de alivio, ya que algunos empleados tenían dudas sobre el futuro de Taylor sin Bob y Kurt en su rol de propietarios.  

«Existía la posibilidad real de que un día nos despertáramos siendo propiedad de un banco o de una compañía competidora. El camino que Bob, Kurt y Andy eligieron tuvo muchísimo impacto para este grupo». 

Las diversas caras de la sostenibilidad  

En estos últimos años, hemos compartido muchas historias sobre las iniciativas de Taylor hacia una actividad más sostenible. En la mayoría de los casos, nuestros esfuerzos se han centrado en la gestión responsable de los recursos naturales que utilizamos. Hemos invertido en proyectos de futuro como la reforestación de bosques de ébano o koa, el reciclaje y la replantación de árboles en entornos urbanos y otras prácticas orientadas a reducir los residuos. En esencia, se trata de la misma filosofía que ha llevado a Bob, Kurt y Andy a invertir en la gente y la cultura de Taylor cediendo la propiedad a los empleados. Y las dos ideas encajan perfectamente. Bob suele recurrir al ejemplo de los árboles de caoba que fueron plantados hace un siglo en Fiyi por misioneros británicos y cuya madera se ha utilizado para construir guitarras Taylor. 

«¿No es genial pensar que, dentro de cien años, los artesanos de Taylor podrían estar haciendo guitarras con ébano, koa y otras especies de madera que nosotros estamos plantando ahora?», imagina Bob.  

Y, tal como señala Barbara Wight, la música es una forma de expresión humana tan esencial y duradera que las empresas dedicadas a los instrumentos musicales pueden durar muchas generaciones.  

«Zildjian se fundó en el siglo XVII, Martin en 1833… No es raro que las compañías de la industria de la música tengan una vida muy larga. Esas empresas en particular lo han logrado traspasando el negocio de padres a hijos. En nuestro caso, perduraremos muchísimos años gracias a nuestros empleados. Y eso es algo verdaderamente increíble».

Barbara Wight, directora financiera de Taylor, argumenta por qué la transición de la propiedad es algo tan significativo para los trabajadores y para el crecimiento continuo de la empresa.

Por qué esta estructura es buena para los músicos 

Es fácil que la gente que ya sentía afinidad con los instrumentos y los valores de Taylor (o incluso con las guitarras en general) vea con buenos ojos nuestros planes a largo plazo. Pero esto también es una buena noticia para los clientes actuales y futuros. 

Dave Pelletier, director de ventas de Taylor, lleva décadas en la industria de la música, tanto en el lado de la fabricación como en el del comercio minorista. Para él, está claro que la transferencia de la propiedad a los empleados supone una relación de beneficio mutuo con los clientes de Taylor. 

«El trato a los trabajadores y a los clientes dice mucho de una empresa. La cesión de la propiedad a los empleados es la máxima expresión de una entidad que acompaña las palabras con hechos. Esta decisión conecta con nuestros clientes y los atrae hacia la marca; ya estamos detectando esa tendencia. También les reafirma sobre la continuidad de nuestra cultura y de la forma en que seguiremos haciendo negocios en el futuro. Todo esto se traduce en una garantía de la calidad que los consumidores obtendrán a cambio del dinero que con tanto esfuerzo han ganado. Y, a nivel personal, como trabajadores individuales de Taylor, ahora tenemos una perspectiva más amplia sobre nuestra labor y nos preguntamos si cada cosa que hacemos beneficiará a todos y, en última instancia, a nuestros clientes». 

Dave Pelletier y Steve Theriault hablan sobre los beneficios de la transición de la propiedad a los empleados para los clientes, distribuidores y socios de la cadena de suministro de Taylor.

La transferencia de la propiedad a los empleados crea clientes satisfechos  

Los datos de las empresas con un PTAE apuntan a unos excelentes registros de productividad, éxito comercial y satisfacción tanto de los trabajadores como de los clientes. Según el Centro Nacional para la Propiedad de los Empleados (NCEO por las siglas en inglés de «National Center for Employee Ownership», una organización de investigación sin fines de lucro), las empresas con un PTAE y otros programas de propiedad de los empleados representan bastante más de la mitad de la lista anual de «las 100 mejores empresas para trabajar en Estados Unidos» publicada por la revista Fortune.

Alex Moss, fundador y presidente del Praxis Consulting Group y exmiembro de la junta directiva del NCEO, fue una figura clave en el equipo asesor para el PTAE de Taylor. Hablamos con él para que nos contara su perspectiva sobre la transición de la propiedad de Taylor desde el punto de vista del cliente. 

Tú has ayudado a muchas empresas en estos procesos de transición. ¿Hay algo que te haya llamado especialmente la atención en el caso de Taylor? 

Lo que más destacaría es la coherencia en torno a los valores de la empresa, desde la motivación general hasta todas las pequeñas decisiones encaminadas a establecer el PTAE y la propiedad compartida de una forma que reflejara el propósito inicial de Bob y Kurt. Eso coloca a la compañía en una buena posición para, tal como ellos mismos dicen, «seguir llevando la alegría de la música» a la gente que recibe sus productos. La transición a un PTAE es un proceso muy complejo en sí mismo, y a mí me ha impresionado ver cómo lo han llevado a cabo reforzando en todo momento la visión de Taylor. 

¿Por qué es bueno este sistema para los clientes de una empresa? 

La principal preocupación de los consumidores es que sus necesidades queden satisfechas. También tienen sus propios compromisos con las comunidades a las que sirven: en el caso de los artistas, crear la música que van a compartir. Esta estructura de propiedad de los empleados es una excelente noticia para los clientes de Taylor a todos los niveles. Los trabajadores de Taylor, que siempre han diseñado y construido unas guitarras increíbles, ahora están aún más arraigados a la empresa y reciben una recompensa por ofrecer instrumentos y servicios de primera. Eso supone un refuerzo directo de lo que quiere el cliente, y aporta una nueva y poderosa razón para que los empleados-propietarios de Taylor cumplan con las expectativas. Al mismo tiempo, los clientes también ven que Taylor está redoblando sus esfuerzos por cuidar de su gente, y muchos consumidores sencillamente admiran a las empresas que hacen este tipo de cosas. Esta filosofía se alinea con la forma en que quieren hacer negocios, y se enorgullecen de trabajar con socios comerciales como Taylor. De hecho, la mecánica del proceso de propiedad puede desviar la atención de la intención principal, que no es otra que crear unas conexiones humanas aún más fuertes. 

¿Existe una correlación entre la realización profesional de los empleados y la satisfacción del cliente? 

La propiedad de los empleados se adapta especialmente bien a una empresa en la que la forma en que los trabajadores desempeñan sus funciones influye directamente en la calidad del producto final. Lo que los empleados de Taylor consiguen todos los días no es fácil; si lo fuera, cualquiera podría hacerlo. Por lo tanto, todo lo que Taylor haga para contribuir a que los empleados-propietarios se sientan conectados con su trabajo les ayudará directamente a ofrecer calidad y valor, y eso hará que los clientes sigan encantados con el producto. Por supuesto, eso no lo crea el PTAE: el mérito es de Bob y Kurt, y ahora, de Andy y de todos los que se han unido a ellos para sacar adelante a la empresa. La transferencia de la propiedad a los empleados protege a la compañía al tiempo que la ilumina y la refuerza, y demuestra que hay una conexión directa entre el éxito de todas las partes. Es bastante simple: cuando los empleados-propietarios trabajan a gusto, rinden más y eso se manifiesta en mejores resultados para los clientes. 

La pasión por el diseño de guitarras sigue viva 

Desde su perspectiva como diseñador jefe de Taylor, Andy Powers está entusiasmado con la promesa de que la propiedad de los empleados mantendrá a la organización alineada con su propósito compartido de servir a los músicos durante las próximas décadas. Andy se ha sumergido profundamente en la historia del diseño de instrumentos musicales y ha estudiado la evolución de otras empresas que han pasado por varias generaciones y cambios de propiedad. Ese conocimiento le permite identificar las oportunidades y los valores únicos que Taylor puede ofrecer a los músicos. 

«Cuando una empresa cambia de manos tras la marcha de su fundador, existe el riesgo de que el propósito principal se desplace desde su enfoque original de buscar la excelencia para sus clientes a simplemente generar beneficios, muchas veces destinados a pagar deudas», explica. «En estos casos, los consumidores pueden pasar de ser considerados como las personas a las que la empresa debe servir a quedar vistos como meros objetos de los cuales se saca un provecho. Cuando esto sucede, el cambio de percepción erosiona la filosofía que dio sentido a la empresa en el momento de su creación». 

«Un PTAE es la mejor opción para nosotros, porque significa que nuestro objetivo primordial de construir instrumentos de máxima calidad para los músicos continuará vivo en el futuro», añade Andy. «Así, Taylor puede mantener su compromiso de servir a los guitarristas y seguir preocupándose por sus empleados, proveedores y recursos forestales. Ningún grupo queda excluido en beneficio de otro. Yo lo veo como la mejor decisión para que una empresa de guitarras consolide su intención de ofrecer productos de primera clase». 

Andy Powers explica cómo ayudará la transferencia de la propiedad a preservar la cultura creativa de Taylor.

La reacción de proveedores, distribuidores y otros socios clave de Taylor ha sido unánimemente positiva. Para nuestro equipo directivo era importante garantizar a todo el mundo que ninguna de nuestras operaciones y actividades de alta gestión y producción iba a quedar alterada por esta transición de la propiedad, y que Bob y Kurt continuarían con sus funciones de administración. El anuncio no solo quería transmitir un mensaje de continuidad sin fisuras, sino también volatilizar cualquier posible especulación sobre el futuro de Taylor (lo cual aportó una reconfortante sensación de tranquilidad a mucha gente). 

Esta transición también puede ser un ejemplo a seguir para otras empresas con una cultura creativa en sus procesos de cambio de propiedad. 

«Taylor es una luz que ilumina el camino correcto en nuestra industria», dice Meng Ru Kuok (cofundador de BandLab Technologies y director ejecutivo de Swee Lee Music, nuestro socio en Singapur, Malasia e Indonesia) en una nota de felicitación remitida a Kurt Listug. «Estamos muy orgullosos de trabajar con vosotros, y ojalá que en el futuro yo pueda hacer lo mismo por mi equipo».

two Taylor GT acoustic guitars - one natural finish and one sunburst finish

Todo queda en familia

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Después de presentar nuestra estilizada y divertida guitarra GT el pasado octubre, ahora anunciamos con entusiasmo el nacimiento de dos modelos premium de palosanto y koa.

Una de las mayores alegrías para los imaginativos diseñadores de Taylor es satisfacer las necesidades de los guitarristas ofreciéndoles herramientas musicales inspiradoras que antes no existían. Normalmente, se trata de instrumentos con ciertas características reinventadas o refinadas que los hacen más fáciles de tocar o que aportan una nueva paleta tonal a explorar. Y, muchas veces, las dos cosas van de la mano.

Ese fue el caso de la presentación en octubre de nuestra «deportiva» Grand Theater, GT para los amigos. Tal como relatábamos en el artículo de portada del último número de Wood&Steel, el diseñador jefe de Taylor Andy Powers había detectado que los guitarristas mostraban un creciente interés por las proporciones compactas y la sensación de agilidad de los instrumentos más pequeños, aunque nadie quería escatimar en sonido. El objeto de deseo de los músicos era una guitarra que diera la talla tanto en el estudio como en el escenario y que fuera capaz de producir un tono rico y pleno.

En realidad, Andy ya había estado dando vueltas a varias ideas de diseño años antes de que Taylor se pusiera en serio a desarrollar el proyecto que acabaría convirtiéndose en la GT. Desde el principio, tuvo claro que una de las decisiones fundamentales para esta guitarra (igualmente trascendente en términos de sensación y sonido) iba a ser la longitud de escala de las cuerdas desde la cejuela hasta la selleta. Andy pensaba en una escala de cuerda algo más corta de lo habitual en las guitarras acústicas modernas («la mayoría de ellas se mueve entre los 650 y 660 mm», especifica) pero más larga que la medida de cuerda típica en una guitarra de viaje (hasta 597 mm, que es la longitud de escala de nuestra GS Mini). Casi todo el mundo pasa por alto esa zona intermedia, pero para Andy era la clave para crear una nueva categoría de guitarra con un sonido y sensación tan atractivos como singulares. Al final, se plantó en una longitud de escala de 612,7 mm, que sería el equivalente a colocar una cejilla en el primer traste de una guitarra con una escala de 647,7 mm.

Para las dimensiones de la caja, Andy vislumbraba algo más grande que la popular GS Mini pero no tanto como la Grand Concert. Tomó prestada la silueta de la Grand Orchestra, nuestro estilo de caja más voluminoso, y redujo tanto sus curvas como su profundidad.

«Se trata [C-Class] de un mecanismo diferente para enfatizar la respuesta de graves de una guitarra relativamente pequeña pero sin renunciar a las aportaciones del diseño V-Class, como las mejoras en el volumen y la entonación».

El otro ingrediente crucial iba a ser la arquitectura del varetaje interno. El desafío era sacar una voz plena de una caja de proporciones compactas. Una de las ventajas del innovador varetaje V-Class de Andy, presentado en el 2018, es su capacidad para mejorar el tono y producir una respuesta uniforme en todo el espectro de frecuencias. Sin embargo, las dimensiones más pequeñas de la GT le llevaron a echar mano de una pizca de «alquimia acústica», como él mismo dice, para realzar los graves. El resultado fue una variante asimétrica de su diseño V-Class a la que llamó C-Class por su elemento estructural en voladizo («cantilever» en inglés).

«Se trata de un mecanismo diferente para enfatizar la respuesta de graves de una guitarra relativamente pequeña», aclara Andy, «pero sin renunciar a las aportaciones del diseño V-Class, como las mejoras en el volumen y la entonación».

La integración de todas estas especificaciones de diseño únicas eleva las guitarras GT a una categoría propia que ofrece una combinación irresistible de sonido espléndido y comodidad de interpretación. La longitud de escala y las cuerdas de calibre fino (.012-.053) crean un perfil de tensión liviano y fluido; de hecho, la sensación sería la misma que al tocar una guitarra con escala de 647,7 mm afinada un semitono hacia abajo. La escala más corta también comporta una ligera condensación del espacio entre trastes, de manera que los acordes complicados son más fáciles de digitar.

«Es una de las guitarras más cómodas que he tenido en las manos», escribía en diciembre Art Thompson, el gurú de los bancos de pruebas de la revista Guitar Player, en su reseña de la GTe Urban Ash (a la que, por cierto, galardonó con un premio Editors’ Pick a la «favorita del editor»). «Es ligera como una pluma, pero enormemente dinámica y expresiva».

Otros detalles de diseño que contribuyen a la agradable sensación táctil de la GT son la cejuela de 43,6 mm de ancho, que se sitúa entre los 42,8 y los 44,4 mm de otras guitarras Taylor de 6 cuerdas, y un nuevo perfil de mástil que se adapta a la longitud de escala exclusiva de la GT.

«Este perfil presenta elementos del clásico mástil Taylor y lanza un guiño al diseño compuesto que desarrollamos para la Grand Pacific», apunta Andy. «En proporción, tiene un punto extra de profundidad y presencia en la mano del guitarrista que llama la atención en un instrumento con tanta sensación de agilidad. Aun así, la sutil transición del perfil desde la cejuela hasta el tacón ofrece un tacto tan agradable y equilibrado que parece que no tengas que hacer ningún esfuerzo al tocar».

En Taylor nunca dejamos de recibir mensajes de guitarristas (desde principiantes hasta veteranos que quieren reducir el estrés de las manos y disfrutar lo máximo posible de una actividad que les encanta) que nos preguntan cuáles son los modelos más cómodos de tocar. Y, teniendo en cuenta los numerosos rasgos que la hacen tan confortable para la mano, la GT es sin lugar a dudas una opción excelente.

Hora de divertirnos en serio

Cuando en octubre estrenamos la GT (que se ha convertido en el modelo fabricado en los Estados Unidos que más rápido se ha vendido en la historia de Taylor), acompañamos su lanzamiento con el lema «diversión en serio» en referencia a la fusión de facilidad de manejo y alto rendimiento que creemos que esta guitarra encarna. En retrospectiva, si podemos considerar a la GS Mini como nuestro producto de más éxito, es en parte porque con ella conseguimos hermanar un tamaño perfecto para tocar en el sofá y una voz sorprendentemente robusta. Sin embargo, sabíamos que aún había margen (y expectación por parte de los guitarristas) para subir el listón de sofisticación musical con un instrumento compacto.

La GT Urban Ash, el modelo inicial, presenta fondo y aros de madera Urban Ash maciza con tapa de pícea también maciza, y está disponible con electrónica ES2 opcional. La elección de esta especie de fresno (también conocida como fresno de Shamel o fresno silvestre mexicano) obedecía a un doble propósito: no solo nos encantan sus propiedades tonales similares a las de la caoba, sino que veíamos a esta guitarra como otra emocionante expresión de nuestro compromiso con la iniciativa de madera urbana en la que estamos inmersos, basada en utilizar madera obtenida de forma responsable a partir de árboles que llegan al final de su vida y van a ser retirados de áreas municipales.

También queríamos que nuestra primera guitarra GT fuera ampliamente accesible para los músicos, así que optamos por unos complementos modestos y la lanzamos en el mismo rango de precios que la serie American Dream. De esta forma, la GT se situaba al nivel de los modelos más asequibles de la línea Taylor fabricados en los Estados Unidos exclusivamente con madera maciza.

Hasta ahora, esta guitarra ha recibido una calurosa acogida por parte de los críticos y artistas que han podido tenerla entre manos.

En el escenario: FINNEAS

Hablamos con el premiado compositor y productor FINNEAS, uno de los primeros artistas que han tocado la nueva GT K21e.

En uno de los vídeos de su serie «First Look», el probador de equipos de Premier Guitar John Bohlinger elogiaba su «magia bluesera» y destacaba la dicotomía de la «diversión a lo grande» de la GT.

«Parece el tipo de instrumento con el que podrías perderte en el bosque durante unos días y, nada más volver, dar un concierto en un estadio», comentaba.

En «Riffs de la crítica» tienes más primeras impresiones sobre la GT Urban Ash.

Nuevos modelos GT

Desde la fase inicial de su desarrollo, la GT prometía un gran potencial como otra versátil plataforma para que Andy siguiera proponiendo innovadoras y atractivas combinaciones de maderas y tratamientos estéticos. Es más, ya hemos adoptado oficialmente a la GT como nuevo miembro de nuestra familia de formas de caja, y le hemos atribuido el número 1 para designarla dentro de nuestro esquema de nomenclatura de modelos.

Nos encanta la idea de arrancar el 2021 ampliando el repertorio GT con dos nuevos ejemplares: la GT 811e de palosanto y pícea, que suma una voz más a la riqueza de la Serie 800, y la K21e íntegramente de koa, que aporta otra nueva y seductora personalidad musical a nuestra Serie Koa.

Observa cómo Nicholas Veinoglou saca partido al tono rico y la cómoda sensación de las nuevas Taylor GT 811e y GT K21e.

Aquí está la GT 811e…

Andy tenía muchas ganas de crear una guitarra GT con la clásica combinación de palosanto y pícea de Sitka.

Él siempre compara el trato de las maderas con la forma particular en la que distintos chefs o comunidades geográficas utilizan los ingredientes básicos de la cocina para imprimir una identidad original a una receta ya conocida.

«En la GT 811 escucharás ese sonido característico de las guitarras de pícea y palosanto con tapa plana, pero la nueva forma y estructura de la GT lleva la experiencia de interpretación y escucha a otra dimensión», afirma Andy. «Este modelo mantiene todos los rasgos que tanto nos gustan de la GT, como su esbelto contorneado, una voz sorprendentemente plena y esa sensación de agilidad y total comodidad en el mástil y las cuerdas, pero hemos moldeado su tono para darle más densidad y saturación de armónicos. La tapa responde rápidamente incluso a la articulación más delicada, y está respaldada por ese sonido profundo que define al palosanto».

Estéticamente, la guitarra comparte muchos de los complementos estándar de la Serie 800, como los perfiles de arce, roseta de abulón, incrustaciones con diseño Element en madreperla, golpeador de palosanto y acabado brillante de 4,5 milésimas de pulgada en la caja. Como características más personales, la GT 811 cuenta con varetaje C-Class, caja sin apoyabrazos (debido a la forma compacta y confortable de la GT) y clavijas de afinación Taylor Mini de níquel ahumado (las Mini son más adecuadas para proporciones pequeñas, y su peso reducido ayuda a mantener el equilibrio físico de la guitarra). La GT 811e también incluye la electrónica ES2 integrada y se distribuye en nuestro atractivo AeroCase, un estuche que ha enamorado a los músicos por ser ligero y ultrarresistente al mismo tiempo.

… Y aquí, la GT K21e

La versión íntegramente de koa de la GT irradia una fabulosa armonía entre belleza estética, comodidad de ejecución y expresividad sonora.

«El tono de esta guitarra es una muestra perfecta de la dulzura y el equilibrio de medios que hacen única a la koa», opina Andy. «Tiene un sonido vibrante y definido con un ataque suavemente redondeado. Su respuesta equilibrada resulta ideal para utilizarla como instrumento rítmico, pero también va de maravilla para el fingerstyle o estilos más inclinados hacia la guitarra eléctrica».

Este modelo con tapa, fondo y aros de koa maciza veteada presenta un tratamiento shaded edgeburst alrededor de la caja y el mástil. Por supuesto, no faltan complementos de la Serie Koa como los perfiles y el fileteado de arce, un elegante motivo de incrustaciones Spring Vine en arce, acabado brillante de 4,5 milésimas de pulgada en la caja y clavijas de afinación Gotoh Mini 510 en oro viejo. La guitarra está equipada con la pastilla ES2 y viene en el estuche AeroCase de Taylor.

Una interesante diferencia tonal entre los nuevos modelos GT y la GT Urban Ash original, más allá de los colores sonoros distintivos de las propias maderas, es el efecto de los diversos tratamientos de acabado. Así lo explica Andy:

«Las guitarras GT Urban Ash tienen un acabado mate ultrafino a base de agua con un factor de amortiguación muy bajo, lo cual permite a las maderas generar un perfil de armónicos directo y orgánico. Por su parte, los modelos GT de la Serie 800 y la Serie Koa lucen el acabado brillante más tradicional de Taylor, que filtra levemente las características de cada pieza de madera para refinar la respuesta».

Sea cual sea la guitarra GT que más te llame, una cosa es segura: todas ellas te ofrecerán una experiencia de interpretación fantástica. Es cosa de familia.

En taylorguitars.com encontrarás más información acerca de todos los modelos GT de Taylor, incluidas las especificaciones completas, fotografías, demostraciones en vídeo y otros contenidos. Si quieres saber más sobre la disponibilidad de estas guitarras, ponte en contacto con el distribuidor de Taylor en tu zona.

Riffs de la crítica

Aquí tienes algunos comentarios extraídos de reseñas recientes de la GTe Urban Ash.

Guitar.com

«…a los que no somos virtuosos de la guitarra acústica, esta sensación cómoda y relajada nos anima a ser un poco más ambiciosos. Por ejemplo, es mucho más fácil hacer bendings en la cuerda de Sol entorchada que con una acústica con una longitud de escala más convencional, así que puedes plantearte los solos casi como harías con una eléctrica con cuerda de Sol plana».

«Las notas agudas aisladas se quedan flotando en el aire más tiempo del que te esperarías. El contenido armónico es generosísimo, y la entonación es espectacular incluso con afinaciones abiertas más bajas…».

«Cuanto más tiempo pasas con esta guitarra, más encantos te revela. Para los cantautores, el tamaño compacto y la sensación intimista de la GT la hacen ideal tanto para el salón de casa como para el escenario o el estudio».

Chris Vinnicombe

Vintage Guitar

«El sonido de los acordes rasgueados es absolutamente puro y cristalino. Esta Taylor no te da la rotundidad de una dreadnought, pero ofrece unos matices que sorprenden en un instrumento tan portátil. Los agudos también son dulces, pero no con ese tono fino y debilucho de algunas acústicas, sino con un carácter musculoso de verdad».

«Se puede pensar en la GTe como una pequeña acústica para profesionales… Es tan válida para tocar en directo como para componer canciones sobre la marcha… Esta Taylor no es una guitarra parlor más: la GTe Urban Ash marca sus propias reglas entre las acústicas de caja pequeña».

Pete Prown

Guitar Player

«La GT responde muchísimo al tacto del intérprete, y transita fácilmente entre pasajes suaves y enérgicos manteniendo un tono dulce, enfocado y coherente en todo momento».

«Tiene una presencia imponente que no sospecharías por su reducido tamaño… Es perfecta para viajar, pero brillará igualmente como instrumento de estudio o directo gracias a la riqueza de su tono y a un campo sonoro amplio y pleno».

Art Thompson

American Songwriter

«La GT se adapta magníficamente a solos rápidos y líneas de fingerstyle, pero para nada se queda atrás si quieres sacarle un ritmo contundente tocado con púa… Esta guitarra emite una voz redonda con unas fundamentales sólidas y unos medios muy vivos. Además, ofrece una respuesta inesperadamente potente incluso a un tacto muy suave».

«En cierto sentido, la escala más corta y el menor espacio entre cuerdas de la GT arrojan una luz distinta sobre el paisaje del diapasón. ¡Yo me lo pasé bomba probando acordes que serían incomodísimos de tocar en una guitarra de escala estándar!».

Christian Seaman

Hora de divertirse

Bajar

Llega una nueva clase de guitarra que sorprende por su tamaño, sensación y sonido. La Taylor GT ofrece un tono de categoría profesional en un instrumento ágil y divertido de tocar.

“¿Hay planes en Taylor de hacer una guitarra parlor?”

Es una pregunta que nuestro equipo de atención al cliente recibe con bastante frecuencia. Pero Glen Wolff, el gerente de este departamento, señala que la gente no siempre sabe formular sus cuestiones con precisión y recurre al punto de referencia que considera más próximo. En este caso, esa referencia es una guitarra parlor o, en ocasiones, una GS Mini de madera maciza.

“No es que los clientes busquen exactamente una guitarra parlor tradicional”, aclara Wolff. “A los músicos les encanta la comodidad de un instrumento compacto, pero no quieren comprometer el sonido. Y asumen que una guitarra de caja más pequeña, como una parlor o una GS Mini de madera maciza, estará a la altura en las dos cosas”.

Solo hay un pequeño problema: una GS Mini construida íntegramente con madera maciza no mejorará el sonido significativamente. Sabemos lo que decimos: Andy Powers, el diseñador jefe de Taylor, ha hecho unos cuantos experimentos. Aunque él ya sabía que la cosa no funcionaría, lo intentó hasta el último momento usando cola proteica y otros materiales y técnicas de última generación para maximizar la respuesta tonal. Pero no obtuvo ningún resultado que justificara la producción de esas guitarras.

“Las dimensiones de la Mini imponen unas restricciones inevitables a lo que se le puede sacar a este diseño”, argumenta Andy. “Es una guitarra magnífica para su tamaño, pero no puedes hacer que suene mucho más fuerte sin alargar las cuerdas”.

Bob Taylor chocó contra esa misma pared hace unos años en sus intentos de “vitaminar” a la Baby Taylor, nuestra guitarra de viaje original, para darle una voz más recia y plena.

Bob ya lo dijo en un artículo de Wood&Steel en el 2010 hablando sobre sus pruebas iniciales de rediseño de la Baby Taylor, que finalmente condujeron al nacimiento de la GS Mini: “en general, por mucho que tunees un diseño, el resultado no cambia demasiado”. Bob acabó llegando a la conclusión de que se necesitaba una escala de trastes más larga y una caja más grande. El resto es historia: la GS Mini se ha convertido en una de las guitarras más populares que jamás hayamos fabricado en Taylor.

Aun así, Bob es perfectamente consciente de las limitaciones sonoras de la Mini a causa de su tamaño.

“Si tuviera que describir el tono de la Mini, diría que es divertido y muy digno”, defiende Bob. “Pero, si tocas una GS Mini durante un tiempo y luego pruebas una Academy 10, que es más grande, dirás: “ah, ¡esto es otra cosa!”“.

Tamaño de viaje frente a tamaño completo

Desde el punto de vista de las dimensiones, las guitarras acústicas de cuerdas de acero suelen dividirse en dos categorías básicas: tamaño completo y tamaño de viaje, que obviamente recibe este nombre por sus ventajas de portabilidad. Uno de los factores determinantes es la longitud de las cuerdas, también conocida como escala de trastes o longitud de escala. Se trata de la medida de las cuerdas desde la cejuela hasta la selleta, que representa la máxima longitud de vibración de una cuerda tocada al aire.

En general, las guitarras de viaje tienen una escala más corta que puede llegar hasta aproximadamente 597 mm, que casualmente es la longitud de escala de la GS Mini. Las guitarras de tamaño completo (o escala completa) se mueven entre 628,6 y 647,7 mm. Taylor produce guitarras de escala completa en dos longitudes: 631,8 mm para las Grand Concert y la Grand Symphony rediseñada, y 647,7 mm para los demás modelos, que se sitúan en la escala más larga dentro de las medidas habituales.

Si te has ido fijando en los proyectos de Andy desde su llegada a Taylor hace casi diez años, quizá hayas observado que uno de los diseños que más ha explorado con muy buenos resultados ha sido el de nuestros modelos Grand Concert 12-fret fáciles de tocar. (El estilo de caja Grand Concert es el más pequeño dentro de nuestras guitarras de tamaño completo). Estos instrumentos se han reconfigurado para adaptarlos a la era moderna: la combinación de una caja pequeña con un mástil 12-fret más corto y una longitud de escala de 631,8 mm da lugar a una guitarra cómoda de sostener en el regazo, con una tensión de cuerdas más baja y una distancia entre trastes ligeramente reducida que facilita la acción de los dedos en el diapasón.

Desde su lanzamiento, nuestros modelos 12-fret se han hecho cada vez más populares entre los músicos, sobre todo los que buscan relajar el esfuerzo de la mano del mástil. Por otro lado, estas guitarras generan una respuesta tonal muy viva con especial protagonismo de los medios, gracias en parte a la colocación del puente más cerca del centro del lóbulo inferior.

Andy también ha tirado de las ventajas de nuestra plataforma de diseño 12-fret/Grand Concert para desarrollar modelos de 12 cuerdas más confortables para el intérprete, como la 562ce, la 362ce y la reciente 652ce Builder’s Edition. Estos instrumentos elevaron el listón en cuanto a comodidad y utilidad musical, y apuntalaron aún más nuestra ya consolidada reputación como la marca que construye las guitarras de 12 cuerdas más fáciles de tocar de la industria.

Por el camino, Andy ha analizado esa zona intermedia entre el tamaño completo y de viaje y ha reflexionado sobre las posibilidades de una guitarra con unas proporciones de medidas y escala entre la GS Mini y la Grand Concert. “Examiné esa tierra de nadie entre los tamaños convencionales de viaje y escala larga, y vi claro que ahí faltaba algo”, afirma. “Parecía como si hubiera toda una categoría de dimensiones oculta a la existencia. Y yo quería hacer algo que fuera lo suficientemente grande para sonar bien pero lo bastante pequeño como para llevar la comodidad y la facilidad de interpretación a otro nivel de diversión”.

Una nueva longitud de escala intermedia

Igual que las proporciones de la caja, la longitud de escala es un aspecto fundamental para un diseñador de guitarras.

“De todas las decisiones cruciales que toma un luthier al iniciar la creación de un instrumento, una de las primeras es elegir la longitud de las cuerdas”, comenta Andy. “Y ese parámetro determinará casi todo lo que hará a continuación”.

Cuando empezó a trabajar en las dimensiones de esta nueva guitarra, Andy se plantó en lo que él llama una escala de trastes intermedia de 612,7 mm. Esta medida equivale a la longitud de cuerda resultante al tocar una guitarra de 647,7 mm de escala con una cejilla en el primer traste.

“A veces, los guitarristas afinamos la guitarra de Mi bemol a Mi bemol”, dice Andy. “Algunos músicos prefieren esta afinación porque les permite cantar más fácilmente, pero a muchos simplemente les gusta tocar con una tensión más suave. Si aflojas las cuerdas un semitono, son más agradecidas de tocar, casi como si hubieras bajado un punto el calibre del juego. Sin embargo, aunque la sensación de esas cuerdas no tan tensas es muy seductora, puede ser que no siempre quieras tocar en Mi bemol. A mí, por ejemplo, me gusta utilizar la afinación de concierto, especialmente cuando toco con otros músicos. Para probar esta longitud de escala, cogí una guitarra de 647,7 mm típica, bajé la afinación un semitono y le puse una cejilla en el primer traste”.

Guitarist and music director Nicholas Veinoglou provides a demo of the GT’s bold, shimmering acoustic tone.

El nacimiento de una caja

Una vez definida la longitud de escala, Andy se metió en faena para diseñar un nuevo estilo de caja con unas proporciones situadas entre la GS Mini y la Grand Concert. Imaginó una forma sin cutaway y tomó prestadas las curvas de la rotunda Grand Orchestra aplicándoles la reducción adecuada. La anchura del lóbulo inferior (381 mm) y la profundidad (95,2 mm medidos en la boca) son las mismas que las de la Grand Concert, pero esta caja de 470 mm es 25,4 mm (una pulgada) más corta.

Hemos llamado a esta caja Grand Theatre para seguir la convención de nomenclatura “Grand” de nuestros otros estilos estándar. Pero, en el campus de Taylor, nos referíamos a ella como GT porque esta abreviatura parecía reflejar mejor la personalidad musical juvenil, atractiva y divertida asociada a este instrumento.

Nuevo varetaje C-Class™

Para darle voz a la GT, Andy recurrió a los conceptos fundamentales de su innovadora arquitectura de varetaje V-Class, principalmente la interacción entre la rigidez de la tapa en paralelo a las cuerdas para producir notas con mucho sustain y su flexibilidad para generar un volumen agradable. Pero, partiendo de un tamaño de caja un poco más reducido, Andy quería tener más margen de manipulación sobre la respuesta en frecuencia. Por lo tanto, adoptó un enfoque distinto con un patrón de varetaje asimétrico.

“El sistema V-Class está diseñado para ofrecer una respuesta muy lineal en todo el espectro”, explica. “Todas las notas suenan muy uniformes. Pero yo quería aprovechar la perfecta proporción entre esta caja más pequeña y la longitud de las cuerdas para sacar una respuesta sonora menos regulada. La arquitectura asimétrica permite exagerar la respuesta de graves de la guitarra, por ejemplo. Normalmente, conseguir que una caja pequeña responda bien en el rango de graves es todo un reto, porque no tiene una superficie tan grande como para flexionarse y mover el aire en el grado necesario. Con este patrón de varetaje modificado, obtienes una respuesta que no te esperarías de este tamaño reducido, y eso hace que la experiencia sea mucho más divertida”.

Dado que esta arquitectura emplea un concepto de diseño en voladizo (“cantilever” en inglés), le dimos el nombre de varetaje C-Class.

A la palestra con Urban Ash

Tanto Andy como Bob Taylor vieron el lanzamiento de esta nueva guitarra como otra gran oportunidad para reafirmar nuestro compromiso a largo plazo con el uso de la madera Urban Ash, presentada a principios de este año en la 324ce Builder’s Edition y utilizada en nuestra nueva Grand Symphony 326ce (que también estrenamos en este número de Wood&Steel). Esta madera, obtenida de forma responsable a partir de fresnos de Shamel retirados de áreas municipales del sur de California, tiene un sonido seco, claro y asilvestrado con una agradable calidez en los medios que la sitúa al nivel de la caoba hondureña de alta calidad.

Haciendo una analogía con las razas caninas, a Bob Taylor le gusta llamar a esta especie “el golden retriever de las maderas”.

“Lo único que quiere este tipo de fresno es complacerte”, asegura. “Es una especie fácil de secar, cortar, combar, lijar y mecanizar, y musicalmente funciona muy bien. ¡Es perfecta en todo!”.

El fondo y los aros de fresno macizo se combinan con una tapa de pícea también maciza. Igual que en nuestras guitarras American Dream, el diapasón, el puente y el recubrimiento del clavijero lucen un atractivo y duradero eucalipto ahumado. Por otro lado, los guitarristas más avispados notarán que el tamaño del puente se ha reducido para adaptarlo a la caja GT.

Este nuevo modelo se distribuirá con el nombre de GT Urban Ash y con electrónica ES2 integrada opcional. Y, junto con la serie American Dream, la GT se venderá al precio más accesible para nuestras guitarras fabricadas en los Estados Unidos (es decir, al nivel de la Serie 200 Deluxe). De esta manera, la GT y las American Dream pasan a ser nuestras guitarras de madera maciza fabricadas en Estados Unidos más asequibles.

Los complementos de la GT Urban Ash incluyen incrustaciones en el diapasón con diseño Pinnacle en acrílico italiano, roseta de anillo triple de koa, fileteado de color negro en la tapa, tinte Urban Sienna en el fondo y aros de fresno, acabado mate superfino de 2 milésimas de pulgada, clavijas de afinación Taylor mini de níquel y nuestro estuche ligero pero ultrarresistente AeroCase™.

Tanto Andy como nuestro equipo de desarrollo de productos auguran un gran potencial para las guitarras GT, así que no será extraño que lancemos nuevos modelos en otras series de la línea Taylor en un futuro próximo.

Todo en su punto

La GT se ha diseñado desde cero con una nueva longitud de escala, forma de caja, varetaje y tamaño del mástil, y su magia radica en la integración de esos elementos en una armonía única entre sensación y sonido. Desde el principio, el propósito de Andy fue crear una categoría inédita que mantuviera un equilibro óptimo entre una guitarra de viaje y un instrumento de tamaño completo. Y eso le dio a la GT una cierta aureola de “guitarra en el punto justo” entre el equipo de Taylor. De hecho, el nombre en clave con el que el grupo de desarrollo de producto se refería oficialmente a ella era “Proyecto Ricitos de Oro”.

La GT cuenta con cuerdas de calibre fino (.012 – .053) con una tensión equivalente a la de una guitarra con escala de 647,7 mm afinada un semitono hacia abajo (de Mi bemol a Mi bemol). La sensación es la que tendrías con un juego Custom Light .011 – .052 más cómodo para los dedos, pero con la potencia y el impacto de una cuerda más grande.

La escala acortada también reduce el espacio entre trastes, lo cual ayuda a digitar acordes complicados.

“Este modelo te lo pone fácil para tocar esos acordes complejos que abarcan varios trastes y que en otras guitarras se convierten en un tormento”, sugiere Andy. “El espacio entre los trastes es cómodo incluso para los intérpretes a los que no les cuesta estirar los dedos, ya que a ellos simplemente les parecerá que están tocando más arriba en el diapasón. La tensión más baja hace que aplicar presión sobre las cuerdas sea físicamente más fácil, y la mayor proximidad entre los trastes favorece la digitación”.

Otra característica especial de este mástil frente a otros modelos de Taylor es la anchura de la cejuela de 43,6 mm (entre los 42,8 y los 44,45 mm de otras guitarras), que ofrece un cómodo espaciado entre las cuerdas. Esta medida, unida a la proporción compacta entre el mástil y la caja, permite que las manos estén un poco más juntas y alivia el esfuerzo de la muñeca en la ejecución de acordes con cejilla.

La conexión GT entre coches y guitarras

Andy no pasó por alto los paralelismos entre los atributos musicales de la Taylor GT y el carácter de un coche deportivo GT. En el mundo de la automoción, la designación GT (abreviatura del término italiano “gran turismo”) se refiere a la unión del rendimiento de alta velocidad y la conducción ágil de un deportivo con elementos de lujo que lo hacen cómodo y divertido de conducir durante períodos largos.

“Esta guitarra tiene unas propiedades similares”, compara Andy. “Ofrece una combinación de manejo superágil y respuesta de alto rendimiento, y se ha refinado para que a todo el mundo le parezca muy divertida de tocar”. Andy añade que las confortables proporciones compactas y la baja tensión de las cuerdas hacen de la GT la guitarra de madera maciza más fácil de tocar de la línea Taylor, de manera que promete regalarte largas sesiones musicales sin que se te canse la mano.

A Andy le encanta profundizar en todos los recovecos de diseño que confieren a la GT su identidad musical única, y le satisface enormemente ver que muchos entusiastas de Taylor también tienen un gran interés en esos pequeños matices de construcción. Sin embargo, en esta ocasión él preferiría simplemente pasarle la guitarra a alguien y animarle a tocarla. Igual que ocurre con la GS Mini, la GT encandila al instante con su cómoda sensación, y su gama de sonidos puede abrir nuevos mundos de inspiración a cualquier músico.

“Un intérprete no necesita saber al detalle qué pasa dentro de la guitarra para disfrutarla, así como tampoco hace falta conocer todas las interioridades técnicas y mecánicas de un coche para divertirse conduciéndolo”, opina Andy. “Aquí lo importante es coger la guitarra y tocarla, sin más”.

The rich musical response of the GT Urban Ash ranges from pristine highs and throaty lows, as showcased here by Nicholas Veinoglou.

Artistas enamorados

Jay Parkin, miembro del equipo de marketing de Taylor (se encarga de gestionar la creación de contenidos y es copresentador de nuestro podcast From the Factory y del programa semanal de vídeos en streaming Taylor Primetime en el canal de YouTube de Taylor), ha estado trabajando con nuestro director de relaciones artísticas Tim Godwin para hacer llegar la GT a varios guitarristas durante los últimos meses. En general, los músicos han quedado entusiasmados con la sensación, la capacidad de respuesta y el tono de este instrumento.

“Esta guitarra es ideal para mí, porque me alucina el sonido de una acústica de gran tamaño pero yo soy muy pequeñita”, dice la cantautora de Los Ángeles Sara Niemietz. “Se ajusta a la perfección, es fácil de tocar y suena muy real”.

Thunderstorm Artis, KT Tunstall, Chris Conley and other Taylor artists share their thoughts on the Taylor GT.

Chris Conley, cantante y guitarrista de la banda de rock Saves the Day, le envió este mensaje a Jay: “¿por qué la habéis hecho tan maravillosa? No puedo dejar de tocarla. En serio te lo digo”.

Keith Goodwin, de la banda Good Old War, escribió estas expresivas palabras: “ESTO ES LA BOMBA. En mi vida he tocado una guitarra como esta”.

El guitarrista, director musical, compositor y educador establecido en Los Ángeles Nick Veinoglou, que acompaña a Jordan Fisher y al artista de Atlantic Records Bazzi en giras tanto nacionales como internacionales, casi se desmaya de placer al probar la GT.

“Nunca había sentido tanta conexión con un instrumento nada más sacarlo de la caja. Me recuerda la razón por la que empecé a tocar la guitarra”. (En la edición digital en Internet de Wood&Steel puedes ver a Veinoglou ofreciendo una demostración de la GT).

Jay también tuvo sus propias impresiones después de grabar la guitarra varias veces durante la producción de contenidos de vídeo.

“Es perfecta para grabar. Suena increíblemente imponente y enfocada al mismo tiempo”.

El ingeniero de sonido y cineasta Gabriel O’Brien, autor del artículo sobre grabación de guitarras acústicas en este número de Wood&Steel, también le ha sacado jugo a la GT.

“Es comodísima de tocar, y te da todo lo que podrías desear en una GS Mini de nivel premium: cuerdas más finas, cejuela más ancha, madera maciza, escala un poco más larga… Pero al final, todo eso es lo que hace que la GT tenga su propia personalidad. La he mezclado para varios vídeos y va muy bien para grabar. Dejé la GT a mi lado en la mesa de mezclas y la iba tocando cada vez que hacía un descanso. De hecho, su tono me gusta tanto que decidí usarla para volver a grabar mis partes de guitarra en otro proyecto”.

Pregunta por la nueva Taylor GT Urban Ash a los distribuidores autorizados de Taylor a partir de octubre. Para más detalles sobre la guitarra, incluidas las especificaciones completas, fotografías, demostraciones y contenido de vídeo adicional, entra en taylorguitars.com. También puedes ver un episodio en vídeo de nuestro podcast From the Factory en el que Andy Powers y Bob Taylor hablan en profundidad sobre el desarrollo de la GT.

Momentos Difíciles

Bajar

La cultura de innovación de Taylor está construida sobre la base de la pasión, la solución de problemas y la resolución valiente de situaciones. Durante estos momentos difíciles, sabemos cómo responder. Tenemos que cuidar a los otros tanto como nos cuidamos a nosotros mismos.

Es una pregunta que nuestro equipo de atención al cliente recibe con bastante frecuencia. Pero Glen Wolff, el gerente de este departamento, señala que la gente no siempre sabe formular sus cuestiones con precisión y recurre al punto de referencia que considera más próximo. En este caso, esa referencia es una guitarra parlor o, en ocasiones, una GS Mini de madera maciza.

“No es que los clientes busquen exactamente una guitarra parlor tradicional”, aclara Wolff. “A los músicos les encanta la comodidad de un instrumento compacto, pero no quieren comprometer el sonido. Y asumen que una guitarra de caja más pequeña, como una parlor o una GS Mini de madera maciza, estará a la altura en las dos cosas”.

Solo hay un pequeño problema: una GS Mini construida íntegramente con madera maciza no mejorará el sonido significativamente. Sabemos lo que decimos: Andy Powers, el diseñador jefe de Taylor, ha hecho unos cuantos experimentos. Aunque él ya sabía que la cosa no funcionaría, lo intentó hasta el último momento usando cola proteica y otros materiales y técnicas de última generación para maximizar la respuesta tonal. Pero no obtuvo ningún resultado que justificara la producción de esas guitarras.

Después de casi medio siglo, lo que Kurt y Bob han aprendido es que ni los buenos ni los malos tiempos duran para siempre y que con la mezcla adecuada de pasión y determinación, nos impulsa hasta atravesar los tramos más escabrosos. “Cuando éramos un pequeña compañía y quebramos, trabajamos duro y nunca nos rendimos sin importar qué tan desesperanzado pareciera el panorama”, dice. “Nos concentramos en trabajar, en pensar en nuevas ideas, en seguir intentado. No teníamos nada sobre lo qué construir. Tuvimos que inventarlo todo de cero y buscar ideas geniales para responder al mercado. Hemos tenido emergencias fuertes a lo largo del camino, algunas veces incluso teníamos sólo una oportunidad de hacer las cosas bien y encontrar el éxito, pues de lo contrario fracasaríamos y no sobreviviríamos. La habilidad de responder a la adversidad se ha vuelto parte del ADN de nuestra compañía.”

La naturaleza de su travesía le ha dado a Bob y a Kurt un profundo respeto por los músicos del mundo, quienes transitan un camino paralelo que también requiere adaptabilidad y resiliencia en la búsqueda de su pasión para poder sobrevivir. Esta misma noción se expande a los fabricantes de instrumentos y a los propietarios de tiendas de música independientes. Realmente a cualquiera que haya buscado conseguir sus sueños con tenacidad. Aunque Taylor es una compañía más grande ahora, que cuenta con un banco profundo de talento y de recursos, el gran diseñador de guitarras Andy Powers, quien ahora también es uno de los socios dueños de la marca, dice que una de las fortalezas de la cultura de Taylor es que todavía podemos pensar como si fuéramos una compañía pequeña.

“Una de las razones por las que amo trabajar con Bob y Kurt es la manera en la que han mantenido la mentalidad intrépida de un negocio cuando recién empieza”, dice. “Han construido una herencia de trabajar duro a través de los días buenos, mundanos y los más difíciles”. Claro, la monstruosa pandemia del COVID-19, con su arrasadora ruptura global, ha introducido una nueva escala de dificultades y complejidades por superar. Y aún así, Bob, Kurt y Andy, junto con otros líderes de Taylor, han recurrido al libro de jugadas de Taylor para saber cómo responder a la adversidad: vamos a cerrar las escotillas, a ser creativos y a diseñar soluciones para las necesidades de nuestros socios en la comunidad de la música.

Respondiendo a una nueva realidad

Como una compañía de alcance global, Taylor ha estado siguiendo con atención los desarrollos sobre la crisis del COVID-19 propagarse desde China a Europa y luego a Estado Unidos a principios de este año, creando una ola de cierres de negocios y aislamientos sociales. La mayor preocupación de Taylor fue proteger la salud y bienestar de sus empleados y de las familias en EE.UU, Méjico, Europa y Camerún. Al mismo tiempo, sabíamos que la supervivencia de nuestros proveedores y clientes, junto con la de los músicos, estaba también en riesgo. A principios de marzo empezamos a implementar medidas de protección y seguridad internamente y poco después, suspendimos los tours por nuestra fábrica y cerramos al público nuestro campus en El Cajón, California. El 19 de marzo, el gobernador de California, Gavin Newsom anunció un aislamiento obligatorio para todo el estado y la producción en El Cajón fue suspendida. La región de México de Baja California, donde se encuentran nuestras instalaciones de manufactura, estaba atrasada con respecto a nuestra línea de tiempo acá en el sur de California. El viernes 17 de abril, se tomó la decisión de suspender las operaciones allí.

Afortunadamente, los equipos ejecutivos y de gerencia de Taylor se habían estado reuniendo productivamente para planear un escenario de cierre y coordinar los esfuerzos requeridos para volver a abrir, desde ayudar a los empleados de El Cajón a participar en el Programa de Trabajo Compartido del estado de California (el cual proporciona a las empresas alternativas diferentes a los despidos), hasta desarrollar nuevos protocolos de seguridad para cuando podamos volver a producir guitarras. Taylor también inició conversaciones con oficiales de la ciudad de El Cajon y el condado de San Diego, para asegurarse de que estaban al tanto de la situación y apoyando los pasos que se estaban planeando. De esta manera pudimos trabajar de la mano hacia una aproximación por fases al momento de re-abrir operaciones críticas. Mientras tanto, cambiamos las operaciones no enfocadas en la producción para que pudieran ejecutarse desde casa, utilizando herramientas como las teleconferencias para poder reunirnos y colaborar. Y así, volvimos al trabajo.

Manteniéndonos conectados con nuestros clientes

Aunque ya habíamos dejado de aceptar guitarras para reparación, miembros de nuestro equipo de Servicio al cliente continuaron respondiendo a las dudas de nuestros clientes de manera remota en Norte América y Europa y pudieron adaptarse tranquilamente. Dada la organización remota, nuestro encargado de Servicio al cliente, Glen Wolff decidió que la mejor manera de trabajar para su equipo sería a través de emails y chats, principalmente. “Ya habíamos estado implementando la comunicación por mail y chat, así que fue una transición fácil a la hora de trabajar desde casa”, dice Wolff.

“En un momento como este le da a la música y a los músicos un sentido de propósito.”

Tim Godwin, Director de Relaciones del entretenimiento.

“No contestar llamadas nos dio el tiempo de posibilitar que la opción de ‘chat en vivo’ estuviera disponible la mayor parte del día, y los clientes la usan muchísimo. También sacamos provecho de la flexibilidad en los horarios de la gente cuando trabajan desde casa y la mayoría de los días hemos expandido nuestra cobertura de chat de 6 a.m. a 5 p.m. Hasta el momento nos ha funcionado bastante bien. No sentimos que estemos quedándonos cortos a la hora de responder a las expectativas de nuestros clientes”.

Apoyo a tiendas

Sabíamos que nuestras tiendas aliadas, especialmente las tiendas de música independientes, serían vulnerables a la incertidumbre que se aproximaba. El tiempo era esencial así que a mediados de marzo, creamos e implementamos una promoción más rápidamente de lo que habíamos logrado nunca antes. La promoción, llamada Días Taylor, era diferente a todo lo que habíamos hecho antes – estaba diseñada para ofrecer gran valor a los clientes y también para ayudar a las tiendas a hacer negocios en un momento en el que muchos estaban al borde de cerrar sus tiendas físicas temporalmente. “Pasó de ser sólo un concepto a estar disponible para nuestras tiendas aliadas en cuestión de días”, dice el vicepresidente de Ventas de Taylor, Monte Montefusco. “Fue un verdadero reflejo de nuestra cultura, de nuestro deseo de ayudar a las tiendas aliadas y de nuestra habilidad de unirnos como equipo”.

La promoción estuvo en vigencia desde finales de marzo hasta el final de mayo y fue ampliamente aceptada por tiendas y clientes. Se ofreció en Norte América (EE.UU y Canadá) y adaptada para otros mercados al rededor del mundo incluyendo Europa, Méjico, Perú, Costa Rica, Chile, Corea del Sur y Australia. “Las tiendas se reintentaron y encontraron nuevas maneras de servir a su comunidad musical” dice Monte. “Las redes sociales se convirtieron en ese letrero de ‘estamos abiertos’ que poníamos en la puerta. La promoción fue un gran oportunidad para las tiendas de acercarse a los músicos e inspirarlos a trabajar en su arte mientras trabajan desde casa”.

Tiendas independientes que han sido aliados de Taylor durante mucho tiempo, como Tobias Music, ubicada en el suburbio de Downers Grove en Chicago, estuvieron agradecidas de tener una promoción convincente para sus clientes durante estos tiempos difíciles para todos”. “Para nosotros ha sido enorme”, dijo Paul Tobias a finales del mes de abril. “En este mundo nuestra tienda ha estado ‘cerrada’ durante cinco semanas y nuestro gobernador acaba de anunciar que el Aislamiento Obligatorio en casa será extendido. En general, los negocios están pasando por un mal momento pero con la promoción de Taylor que implementamos en línea, hemos podido mantenernos a flote después de cinco semanas de dificultades. Taylor se convirtió en nuestro bote salvavidas”.

Otras tiendas se adaptaron como pudieron, algunas ofreciendo el servicio de recogida

Trabajando con nuestros proveedores de madera

La naturaleza disruptiva de la pandemia también significó retos para Taylor en cuanto al manejo de sus proveedores de madera. Para empezar, trabajamos con proveedores de todos los rangos, pequeños y grandes, y cada situación necesitaba soluciones únicas. Los proveedores más pequeños son por lo general más vulnerables, explica nuestro Director de operaciones de madera y recursos, Charlie Redden. “Muchos de nuestros proveedores de madera sólo tienen dos o tres clientes que les compran una vez al año”, dice. “Cuando un pueblo pequeño en América Central depende de uno o dos clientes- así como también nosotros dependemos de ellos- la sociedad necesita ser tratada con atención y cuidado durante momentos como este”.

Otro reto lo encontramos al darnos cuenta de que la pandemia interrumpió el ritmo y la sincronización de nuestra cadena de suministros, pues detuvo por completo nuestra operación de manufactura. Sin embargo, en muchos casos, nuestro compromiso de compra de madera se cierra en contratos de un año o más y, a menudo, la supervivencia de esos proveedores se encuentra en riesgo. “Estamos encontrando maneras creativas de comprar la madera justa para mantener a nuestros proveedores en el mercado a la vez que mantenemos un inventario de madera saludable para Taylor”, dice Redden. “Si podemos ayudar a nuestros proveedores conectándolos con otras oportunidades en el mercado como la producción de muebles, la industria de la construcción o el uso de madera como pasatiempo para que se puedan recuperar, ya que nosotros no estamos comprando tanta como antes, estamos felices de hacerlo”.

Ayudando a los artistas a adaptarse

La interrupción masiva que se dio en la industria de la música ha forzado a los artistas a volverse creativos de nuevas maneras. Algunos guitarristas se han inclinado hacia dar clases de guitarra en línea, mientras otros artistas han acudido a las redes sociales como Instagram, Facebook y Twitch para publicar o transmitir en vivo sus presentaciones. Aquellos que tienen una fanaticada fuerte han encontrado pequeñas maneras de usar sus redes sociales para monetizar sus presentaciones virtuales. En algunos casos los fans pagan por conciertos que se transmiten en vivo y en otros, se da la opción de dejar una donación voluntaria. Le hemos brindado nuestro apoyo a artistas Taylor de todas las maneras en que hemos podido. Principalmente, usando nuestras redes sociales para promover sus transmisiones en vivo y otras presentaciones con nuestros fans Taylor. Hemos desarrollado un calendario semanal de todas las transmisiones en vivo de nuestros artistas Taylor en nuestro Live From Home Digest, el cual puede encontrar en en la sección del blog de nuestra página web. Cada semana podrá encontrar nueva información de artistas en diferentes plataformas como Facebook, Twitter, YouTube y más.

El director de Relaciones del entretenimiento de Taylor, Tin Godwin, dice que a pesar de los difíciles retos financieros que los artistas hoy deben enfrentar, algunos han encontrado una luz al final del túnel y han descubierto beneficios en este momento surreal que estamos viviendo. “Algunos han usado este tiempo para mejorar su manera de tocar, se han concentrado en escribir nuevo material o han explorado maneras de compartir su música con sus oyentes desde casa”, dice Godwin. “Otros, incluido yo mismo, han estado colaborando remotamente con frecuencia con amigos músicos. La realidad es que muchos músicos, para bien o para mal, están más disponibles en este momento, de manera que en algunos casos han podido sumergirse por completo en proyectos creativos que habían estado posponiendo durante mucho tiempo. Para ellos, esta experiencia ha sido incluso gratificante”. Otros artistas bien establecimos han estado dando presentaciones en vivo desde casa para ayudar a organizaciones benéficas. Para los fans que también están pasando más tiempo en casa, las presentaciones ofrecen una conexión íntima y realista con sus artistas favoritos. Godwin dice que hoy más que nunca esta experiencia compartida ha resaltado el concepto de comunidad en el mundo de la música, tanto para la gente que trabaja en la industria como para artistas y audiencias.

“He estado viendo más actos de empatía y amabilidad entre la gente”, dice. “En un momento como este, la música y los músicos encuentran un mayor sentido de propósito. Sigue siendo entretenimiento pero ahora es más que eso. Es una manera de conectar a las personas y ayudarlos a sentirse unidos aún cuando físicamente están alejados. “Incluso desde mi posición en Taylor he encontrado que la gente está más disponible para hablar ahora” añade Godwin. “Sea un artista o alguien más que trabaja en la industria, ahora tenemos más tiempo para discutir intereses, asociaciones y proyectos y para planear lo que vendrá más adelante”

Bob y Andy se ponen a trabajar

Aunque la producción de guitarras Taylor se detuvo temporalmente, mucho está pasando tras bambalinas. Bob Taylor y Andy Powers han respondido al desafío de este momento trabajando juntos en varios proyectos con vigor y fuerza. Sus instintos de diseñadores se han agudizado y sincronizado a medida que se han alimentado de la creatividad de uno y de otro. “Tanto Andy como yo prosperamos cuando pensamos creativamente”, dice Bob. “Ambos somos constructores y nos gusta resolver problemas. Cuando nos sentimos acorralados contra la pared, nos encanta encontrar una manera innovadora de salir del problema, y porque mucho está en riesgo, trabajamos más rápido”.

Por su parte, Andy siempre tiene guardados espectaculares diseños, esperando el momento perfecto para darles vida. La realidad actual, junto con la incertidumbre que la acompaña, dice él, son estímulos para sacar varios proyectos adelante. “Estamos trabajando en estos proyectos para el beneficio de todos- nuestros empleados, nuestros clientes, nuestros proveedores y claro, nuestros guitarristas”, dice. “Estamos teniendo todo en consideración y usando todos nuestros recursos para sobrellevar la situación actual”. Aunque no estamos en libertad de revelar nuestros nuevos diseños, Andy dice que estarán empapados de un nuevo sentido de propósito. En las reuniones de desarrollo de producto que llevamos a cabo vía teleconferencia en abril, tanto Andy y Bob tenían más energía que nunca cuando discutían la próxima línea de productos que planeamos introducir. “Mientras que unos pueden decir que nosotros sólo construimos guitarras, yo creo que hacemos mucho más que eso”, dice Andy. “Podemos ayudar a crear un rayo de esperanza, de alivio, inventamos una manera de compartir nuestras experiencias en forma de canción”.

Nuevos protocolos de seguridad

Durante el cierre de nuestras fábricas, nuestro directores ejecutivos y jefes de área supervisaron todos los protocolos de seguridad en nuestra fábricas de El Cajón y Tecate siguiendo muy de cerca las recomendaciones de los departamentos de salud. esto incluye implementar distanciamiento social, incrementar la limpieza y el uso de equipo de protección para todos los empleados. Termómetros de distancia también fueron implementados para revisar la temperatura de todos los empleados que entren en las instalaciones.

Otras modificaciones incluyen espacio suficiente para cumplir con distanciamiento social, plexiglás cuando es necesario, adecuación de espacios en cocinas y lugares de descanso. En nuestra fábrica de Tecate utilizamos todos nuestros recursos de la sección de estuches para producir mascaras protectoras. “Los estamos usando en nuestras dos fábricas de Tecate y El Cajón” nos dice el VP de manufactura, Chris Wellons. “Tambien hemos donado miles de tapabocas. Hemos autorizado algunas operaciones en la fábrica con un limitado personal de técnicos. (todos participando de manera voluntaria), con un retorno de tiempo completo empezando el 18 de Mayo.

Una de las metas más importantes es el de adaptarnos a la nueva realidad preservando la cultura de la empresa, dice nuestro VP de desarrollo de productos Ed Granero, miembro del comité ejecutivo junto con Wellons. “Hemos cultivado una cultura de colaboración de “puertas abiertas” aquí” dice Granero. “nuestra fortaleza es el trabajo en equipo. A medida que nos movemos hacia el próximo paso de nuestra nueva vida de trabajo, vamos a encontrar nuevas formas de trabajar como un equipo y seguir cumpliendo nuestras metas. A medida que vuelva nuestra fuerza de producción, las medidas de seguridad estarán destinadas a que tengamos un ambiente de trabajo seguro para todos.”

Granero enfatiza que, aunque las guitarras no sean consideradas “esenciales” la gente de Taylor si lo es. “La gente acá son tan trabajadores como innovadores, y son tan dedicados como cualquiera “dice el. Juntos Granero y Wellons quieren reconocer a todas las personas que ayudaron ¨a que la luz de la fábrica” estuviera prendida durante el problema de producción. Wellons fue muy efusivo en esa frase por la forma en que el departamento de recursos humanos puso en marcha los nuevos protocolos de seguridad. “Solo quiero extender mi agradecimiento a todos los empleados que estuvieron involucrados en la planeación, coordinación y más que nada por la ejecución de todos estos planes en las fábricas.” el escribió en una nota a la empresa. “agradecemos muchísimo el coraje y dedicación que todos han mostrado durante estos tiempos tan difíciles”

“La música no es algo agradable para tener, es una necesidad.”

Kurt Listug

El camino adelante

Mientras esta nueva normalidad empieza, Kurt recoge de las experiencias pasadas junto con Bob. “Estamos analizando como navegar estas aguas tormentosas” Dice él. “Tenemos un gran liderazgo junto a una gran creatividad y contamos con increíbles empleados. Tengo la seguridad que superaremos esto y que volveremos mucho más fuertes como empresa. “Una de las cosas que más amo de la cultura de nuestra empresa es la forma en la que nos apoyamos mientras trabajamos por una meta en común especialmente durante tiempos difíciles,” él dice. “Algunos de mis momentos de más orgullo han venido de momentos en los cuales hemos tenido que luchar contra la adversidad. Bob y Andy compartieron con nuestros empleados que no podrían pedir tener un mejor grupo de gente para enfrentar este momento tan difícil. Yo comparto ese sentimiento y lo quiero expandir a la comunidad de distribuidores y tiendas de las cuales nos sentimos privilegiados de ser parte.

Preguntas y Respuestas con Kurt Listug Co-Fundador y CEO

P: Usted y Bob crearon la identidad de Taylor Guitars durante momentos muy difíciles. Tuvieron la espalda contra la pared muchas veces, especialmente en los primeros años de la empresa. Como esas experiencias prepararon a Bob ya a usted- Y ahora a Andy Powers junto a otros lideres ejecutivos de la empresa para responder a situaciones como esta?

R: Esa época nos dio mucha confianza y nos enseñó a que podemos superar cualquier cosa. aun cuando no veamos ninguna luz al final del túnel. Nos hemos probado a nosotros mismos que estamos llenos de recursos. Aunque es sumamente estresante, nosotros sabemos que ganaremos batallas y abriremos camino.

P: Que enseñanzas le esta dejando como líder este momento tan especial? Como cree que Taylor Guitars volverá mas fuerte como empresa?

R: Estoy maravillado de ver a los empleados de la empresa haciendo todo lo que pueden para que sigamos moviéndonos para adelante como empresa. La gente se siente 100% enfocada al éxito. Yo creo que la empresa se está volviendo más unida. Nuestro trabajo en equipo está en su mejor momento y estamos sentando las bases para la recompensa que vendrá en los próximos años.

P: A parte del revolcón que este escenario a creado en el sistema, es fascinante como la gente se está adaptando. Ya sea los artistas usando las redes sociales para comunicarse con las personas o las tiendas inventando formas creativas para seguir con su negocio, nuevas ideas nacen y echan raíces. ¿Qué opina de lo que está viendo? ¿Y qué dice esto del poder de la música en momentos como este?

R: No puedes quedarte sentado. No hay garantía de supervivencia. Es una época muy difícil y tenemos que hacer todo lo posible para navegar en aguas tan difíciles y mantener el curso hacia adelante. es muy gratificante ver el nuevo poder e importancia de la música. La música nos es algo lindo tener, es una necesidad.

P: Desde su perspectiva, de una empresa que siempre ha mantenido una excelente relación con sus empleados y clientes, ¿qué tan importante es el apoyo para ellos en este momento?

R: Ala empresa le va bien cuando todos hacemos lo mejor para tomar decisiones que beneficien a la mayor cantidad de gente. Esto habla de nuestros valores al tomar decisiones que impacten positivamente a muchos. Eso es muy importante, pero en situaciones difíciles quieres asegurarte que estas empujando a los demás lo más que puedas de forma positiva.

P: ver a Bob y Andy trabajar más cerca últimamente es maravilloso, sobre todo verlos en la búsqueda de cómo construir guitarras en un momento tan difícil como este. Es increíble ver como en un momento como este se ven muy creativos y organizados. ¿Usted se siente estimulado creativamente también pensando en estrategias para el futuro de Taylor?

R: Absolutamente. Esta situación es muy compleja y genera mucha presión, y estamos peleando en progresar. Una de las cosas más difíciles es no saber cuánto dure esta situación y como va a cambiar el mundo. Investigar y mirar hacia el futuro es muy electrizante.